The National: The System Only Dreams in Total Darkness

Ellos desean que la bestia duerma bien, y tantísimos -también el que escribe- estábamos esperando con ansia y deseando ver publicado por fin el nuevo álbum de The National. Sleep Well Beast vio por fin la luz este pasado 8 de septiembre. Una de las mejores bandas de indie rock, una de las mejores bandas de rock a nivel mundial, sin tener que entrar en distinciones, han vuelto con nuevo trabajo bajo el brazo.

«El poder analgésico de las canciones de The National les ha aupado a una cómoda plaza en lo alto del podio de las bandas independientes del rock actual. (…) Disco a disco se han consolidado hasta tal punto que se hace prácticamente imposible esperar un álbum de The National no ya malo, sino mediocre.»

«En su séptimo disco siguen vistiendo la capa de derrotados, a sabiendas de que son una de las bandas más grandes de nuestros días. No es falsa modestia, sino el ADN de los tristes que, muy a menudo, son los mejores poetas.»

«The System Only Dreams in Total Darkness: El que fuera primer adelanto del presente disco es indudablemente el hit de esta colección de temas. Recordad el 1:42, cuando arranca ese riff entrecortado y se añade la segunda voz, porque sólo por ese momento exacto vale la pena conservar este álbum en formol y enseñárselo a los nietos.»

(De la crítica en El Quinto Beatle)

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«Ya en “Trouble Will Find Me” se intuía cierto estancamiento en su estilo: austeridad atemporal con el toque distintivo de los patrones recios y ensimismados de Bryan Devendorf, las guitarras imaginativas de los gemelos Dessner y la voz profunda de Matt Berninger, frontman desaliñado e introspectivo más próximo a un profesor de Literatura que a una estrella del rock. No es casual que cuatro años separen este trabajo de su predecesor. Y tampoco lo es que en su séptimo disco se atrevan con una paleta de sonidos más profunda -sintetizadores, cajas de ritmos y cuerdas que se superponen en ricas texturas, abundantes músicos de sesión-, probablemente espoleados por sus aventuras musicales paralelas, con la ambición clara de sacar lo mejor de sí. ¿Lo consiguen? Rotundamente, sí.»

«Berninger se ha convertido en letrista importante haciendo de la duda confesional su sello. Con total naturalidad, sin un gramo de pedantería. Parece fácil, no lo es.»

«La bestia, quien quiera que sea, dormirá tranquila esta noche con un discazo bajo el brazo.»

(De la crítica en MondoSonoro)

«Con mucha discreción, sobriedad y poco -a priori- nuevo que ofrecer, The National se han ido haciendo un hueco en la escena del rock alternativo de nuestro siglo. El quinteto de Ohio que lanzase hace ya 10 años (que se dice pronto) el sobresaliente “Boxer”, ha estado esta década puliendo su sonido hasta consumar su estilo y cohesionarlo en este “Sleep Well Beast”, su séptimo álbum de estudio. Porque la última referencia discográfica de Matt Berninger y compañía es precisamente en la que mejor se amalgama el trabajo de cada uno de los miembros, en el que todo suena más que nunca en su justo lugar.»

«Aunque “Sleep Well Beast” podía parecer primeramente un disco especialmente político de The National, acaba más resultando en uno que habla de los sentimientos surgidos de la situación en los Estados Unidos. No trabaja sobre el problema en sí, sino en sus consecuencias y el malestar que genera la circunstancia, siendo más honesto y menos pretencioso.»

«En un inesperado giro de los acontecimientos, sin perder identidad y sin cambiar ninguna base de su estilo, The National firman un séptimo disco sorprendente a la par que reconfortante.»

(De la crítica en Binaural)

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Hermosa portada: La casa o cabaña que en realidad es el estudio que construyó Aaron Dessner para que la banda grabara con mucha calma su nuevo disco

«Sleep Well Beast, el séptimo disco del grupo de Matt Berninger y la doble pareja de hermanos Devendorff y Dessner suponía uno de los mayores retos de su carrera. Y por eso, posiblemente buscando escapar de lo previsible, se han tomado más de 4 años para crearlo, el lapso más largo de su carrera. El resultado es, ya podemos decirlo, de nuevo notable y, si bien no vuela tan alto como en sus mejores momentos, contiene a la vez argumentos que satisfarán tanto a los que solo les piden un poco más de ese ya conocido rock épico emocional como a los que buscan algo más, un extra que refresque su propuesta y la siga haciendo excitante y sugerente.»

«Me atrevo a decir que ‘Sleep Well Beast’ no será, muy probablemente, el disco favorito de The National para nadie. Pero sigue siendo admirable su manera de afrontar la música, permaneciendo fieles a la idiosincrasia del grupo y, a la vez, abriendo vías de crecimiento para su propuesta. Eso es muy digno de admiración.»

(De la crítica en jenesaispop)

«The first single “The System Only Dreams in Total Darkness” was a bit of a shot across the bow. The song introduces itself with a series of stray-hair noises, a steely guitar line, a frosty choir of “oohing” voices, a boxy drum loop, and an imperious grand piano airlifted from U2’s “New Year’s Day.” It forms an intriguing mist, but as you squint into it, familiar shapes emerge: The major-key chorus arrives with the same effortlessness as all their best songs, with that glinting phalanx of horns pushing it quietly forward. These are National Songs…»

(«El primer single «The System Only Dreams in Total Darkness» fue un poco como un disparo a la proa. La canción se presenta con una serie de ruidos desaliñados, una línea de guitarra acerada, un coro escarchado de voces «oohing», un bucle de percusión que semeja un cajón, y un imperioso piano de cola aerotransportado desde el «New Year’s Day» de U2. Forma una intrigante niebla, pero a medida que uno le echa un vistazo, formas familiares emergen: El estribillo principal llega con la misma facilidad de todas sus mejores canciones, con esa falange centelleante de cuernos empujando silenciosamente hacia adelante. Estas son canciones de The National…»)

(De la crítica en Pitchfork.com)

Ese riff de guitarra que se repite, mordiendo y perforándote. Ese estribillo tan hermoso, realmente inconmensurable. Y ese solo de guitarra, magnífico y salvaje. Temazo, temazo, temazo. Pondré la mano en el fuego y no me quemaré: Sin duda una de las mejores canciones de este 2017…

 

 

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6 respuestas a The National: The System Only Dreams in Total Darkness

  1. evavill dijo:

    Bueno, venga, repito contigo: «temazo, temazo, temazo».
    Aunque lo que más me ha gustado es la cabaña. Yo quiero una así o parecida.

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    • La cabaña mola un montonazo, a mí también me gustaría vivir en una así. Se ve muy acogedora. Pero tengo algunas dudas…¿puedes o no puedes entrar en mi blog? ¿se te carga la página o no? ¿te funciona el ordenador correctamente o no? ¿o son demasiadas preguntas que en el fondo no son de mi incumbencia? Te pregunté un día… Escribí una entrada sobre Bowie, con 125 imágenes sobre la exposición dedicada a él, porque fui a esa exposición hace unos días. ¿Te la vas a perder? Las fotos molan mucho. Es solo una sugerencia con buenas intenciones.

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      • evavill dijo:

        Tu blog se me carga mal y lento y solo puedo leerlo desde el ordenador. Más o menos te he respondido, ¿no?
        Ya me leeré esa entrada sobre Bowie cuando tenga un rato. Prometido.

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        • Vale, gracias y me alegra saberlo. Pero ya sabes, llévate bocata y cantimplora. Sobre el tema de The National, pues con una vez o dos no basta para apreciar su grandeza. He necesitado varias escuchas para que me atrape, me parece fantástico.

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  2. Julia Fern dijo:

    Tú dices… temazo, temazo, temazo… sí, y yo me veo llegando a esa misma conclusión!!!!!!

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